El Liber Iodiciorum: un cuerpo legal importantísimo
El Liber Iodiciorum es uno de los cuerpos legales más importantes de la historia de Europa. Consta de un título preliminar y 12 libros, subdivididos en 54 títulos y 578 leyes. De estas 324 son las mismas que en el Código de Eurico, 99 leyes de Chindasvinto coronadas por el título Flavius Chindasvintus Rex, 87 de Recesvinto bajo el título Flavius Reccesvintus Rex, 3 de Recaredo, y 2 de Sisebuto.
Se gestó en el reinado colegiado de Chindasvinto y Recesvinto y fue finalmente promulgado en el reinado en solitario de este último, concretamente en el año 654 respetando lo establecido en el VIII Concilio de Toledo en diciembre del año anterior.
Es un texto clave para entender nuestra sociedad. Estuvo vigente en los últimos años del Reino Visigodo de Toledo, lo sobrevivió ya que lo usaron los Mozárabes y los reinos cristianos y finalmente pervivió traducido a las lenguas romances conformando lo que conocemos como Fuero Juzgo. Su uso se extendió a lo largo de los siglos y en buena medida estuvo vigente hasta la llegada del Código Civil en el siglo XIX.
Algunas leyes importantes
El Liber Iodiciorum es un texto de su tiempo. Es importante recalcar eso, pero también hemos de entender que es único en su forma, no encontramos exponentes similares en otros reinos europeos. Vamos a contaros algunos de las leyes que más nos han llamado la atención.
Así, en el Libro 2 Título 1 Ley número 12 estipula que el domingo no se puede celebrar un juicio porque la religión es lo primero, ni tampoco en Pascua, es decir, los 15 días que preceden a la Pascua y los 7 posteriores. Ni en Navidad, Epifanía, Ascensión o Pentecostés. También ha de respetarse la siega del 15 de agosto al 15 de septiembre, menos en la cartiginense donde había una plaga de langostas y se tenía que segar del del 15 de julio hasta el 15 de agosto.
Tampoco se hará durante la vendimia del 15 de octubre al 15 de noviembre. El único límite a estas disposiciones es si fuera el caso de un delito atroz que merezca la pena de muerte, entonces el acusado será detenido no importa qué día, y será ajusticiado una vez superados estos periodos.
Además en el Libro 6 Título 2, Ley 2.4 nos habla de la brujería. De hecho se decreta pena de esclavitud para quienes consulten a adivinos, agoreros o vaticinadores. También condena a los hechiceros y provocadores de tempestades que hacen que el granizo caiga sobre las viñas, los que hacen sacrificios nocturnos a los demonios… concretamente a doscientos azotes y a ser rapados deformemente.
Otro apunte importante que demuestra lo detallada que era la legislación visigoda es el que aparece en el Libro 8 que tiene un capítulo entero dedicado a todo lo relativo a los incendios, a qué ocurre si uno quema la casa de otro, en cuyo caso será condenado a la hoguera y con sus bienes se restituirá la casa y las posesiones que hubiera dentro bajo juramento del propietario de acuerdo a lo que estipula la Ley 1 del Título 2 del citado libro.
Hay también todo un título referido a qué ocurre en los casos de daños a los cultivos, árboles o animales que alguien pueda poseer. Las penas casi siempre son restitutivas en el caso de los daños materiales y en función de la gravedad de los hechos decretan castigos físicos más o menos graves.
Una obra legislativa fundamental para la historia de nuestro país
El Liber Iodiciorum es de una importancia clave y, sin que podamos explicar muy bien el porqué, es un elemento que no tiene ninguna importancia dentro de nuestros planes de estudios. Un texto que pone coto a la autoridad real por el bien de la patria y del pueblo en el siglo VII, que en otro país coronaría las tapas de los libros de historia, es un completo desconocido para todos.
Desde Medievalia os invitamos a conocerlo y a profundizar en él ya que es un texto que el Boletín Oficial del Estado pone a nuestra disposición completo, analizado, y sobre todo, de manera gratuita en este enlace.