Joao Félix tuvo una noche a la altura de su calidad
Un partido de Champions en todo el sentido de la palabra. Llegaba el Manchester United como ligero favorito al Metropolitano ante un Atlético de Madrid que no está en su mejor momento pero que dio la cara, presentó un mejor plan y definitivamente mereció más de lo que obtuvo.
Rangnick es el encargado de realizar una transición complicada en Old Trafford y escogió lo previsto, un 1-4-2-3-1 con lo mejor que puede poner sobre el terreno de juego y eso es mucho decir pues en el plano individual los red devils son muy pero que muy buenos. El asunto estaba en las bandas, Sancho y Rashford se iban intercambiando, pero ninguno de los dos fue lo que se esperaba. Eso sumado a uno de los partidos más romos de la trayectoria de Cristiano Ronaldo plantean mucho problemas para los de Rangnick.
Por parte del Atlético de Madrid, los del Cholo hicieron justicia a su idiosincrasia y a lo que representa el argentino como entrenador: intensidad, transiciones, vértigo y una gran capacidad para oler la sangre, todo ello coronado por la movilidad y buen hacer de Correa y por un Joao Félix que tan pronto toca el violín como la guitarra eléctrica.
El gol vino pronto y fue merecido. Minuto 7 el Atleti ahogó el centro del campo del United hasta el punto de que vimos en muchas ocasiones a Varane tratar de salir en conducción para encontrar a Bruno Fernandes. Tras un córner, la pelota le quedó a Lodi que sacó un buen centro desde atrás, uno preciso, tenso, espectacular, que fue incluso mejorado por un remate de cabeza en plancha de Joao Félix emulando a otro de los enormes delanteros que ha tenido este equipo como es Radamel Falcao. La pelota pegó en el poste y entró instalando la locura en la grada del Metropolitano.
El Atlético de Madrid mereció más en la primera parte
El Manchester United tuvo mucho más la pelota, pero en zonas absolutamente inocuas y siempre porque el Atlético lo quiso así. En los casos en los que los rojiblancos recuperaban y no conseguían atacar de manera directa, optaban por un ataque organizado donde su 1-5-3-2 se convertía en un 1-4-4-2 con Lodi jugando en banda izquierda por parte de Reinildo que pasaba al lateral.
La primera ocasión más o menos clara para el United vino en el 35 en una buena combinación en tres cuartos de campo que precedió a un disparo de Cristiano Ronaldo que se fue desviado a la derecha de la portería de Oblak.
Justo antes del descanso el Atlético pudo doblar su distancia tras un remate de Vrsaljko en un centro de Lodi que pega en Lindelof y se estrella en la madera. El Atlético lo hubiera merecido, aunque en estos últimos tramos del primer tiempo había reducido su intensidad y posicionamiento y comenzaban las faltas tácticas como la que hizo Herrera sobre Pogba y por la que vio amarilla en el 46.
Las cosas se emparejaron algo más en el segundo tiempo
Los mismos once comenzaron en ambos equipos la segunda mitad. Un partido ciertamente similar en los primeros minutos, con un United mostrando cierta impotencia para imponer el ritmo y el juego que le conviene. Sorprende la falta de movimientos de Rangnick, que insiste con la misma estructura sin modificar aparentemente nada.
Si que es cierto que el Atlético iba perdiendo metros paulatinamente, cada vez más acostado sobre la meta de Oblak, hacía muy difícil que las transiciones llegaran a buen puerto ya que Correa y Joao Félix tenían que recorrer demasiados metros hasta ocupar posiciones de verdadero peligro, y a la vez y de manera indirecta situó a los Ronaldo, Rashford, Sancho y Fernandes cerca del área colchonera.
Ya en el minuto 60 vimos al Atlético agobiado, sin encontrar la pausa que necesita y con el United cada vez más cerca de llevar el partido a su terreno. Cinco minutos después Rangnick decidió hacer un triple cambio: Wan-Bissaka, Alex Telles y Matic dejaron su sitio a Lindelof, Shaw y Pogba. Cuando uno podría pensar que el técnico alemán quería dar una patada al tablero se da cuenta de que el cambio es hombre por hombre y no tuvo demasiada trascendencia en el desarrollo del encuentro. Justo después Lodi tuvo algunos problemas físicos y pareció que necesitaba el cambio pero finalmente pudo volver.
En este tramo vimos de nuevo más presencia rojiblanca en el medio y en posiciones de peligro, de hecho parecía más cercano el segundo tanto colchonero que un gol por parte del Manchester United. Rangnick dio entrada al internacional Sub-21 por Suecia Anthony Elanga por Rashford y en el Atleti Lemar por Lodi y Griezmann por Joao Félix en el 75.
Y sin embargo, el fútbol tiene estas cosas. Si mereces y no concretas te puedes encontrar con lo que le ocurrió al Atleti: minuto 79 transición del Manchester United por medio de Bruno Fernandes que filtró un pase a la espalda de Reinildo que mide fatal, no llega a cortar y Elanga recibe en el área y define perfecto con la derecha raso buscando el segundo palo de Oblak.
Lo siguió intentando con todo el Atleti, pero no tuvo suerte. En el 85 en un córner desde la derecha la pelota le quedó franca a Griezmann en mitad del área pero su disparo de zurda se estrelló en el larguero. Definición gráfica de lo que fue un encuentro que el Atleti empató a uno mereciendo la victoria y un United que se escapa vivo, de momento.